En esta entrada publico un poco más de las fotos que tomé cuando estuve en Cuba ya hace unos años. Me permito comentarles que es un lugar muy parecido a México y a la vez muy distinto. Creo que nos parecemos mucho en los contrastes que presenta la ciudad y la gente. Tal vez somos distintos en la forma en que hacemos las cosas o en la que vemos el mundo. Estas diferencias se acortan cuando al platicar con amigos con los que mantengo comunicación me doy cuenta que realmente no hay fronteras para quienes trabajan y se comen el mundo luchando por lo mejor.
Aquí otro pedacito de Cuba…
Foto: Lila SaraiCuando llegué a la Habana Vieja me llamó la atención la mezcla de olores, un ambiente muy cálido, húmedo, con toda esa envoltura que sólo el mar cercano puede ofrecer. El piso me llamó la atención pues las calles se encuentran cubiertas con un poco de petróleo, parece que vas pisando madera. El paso firme da cuenta de que estás en otro lugar. Ves andar la gente holgadamente como hace mucho no veía en la Ciudad de México.
Cuando llegué a una de las avenidas que rodean esta parte de la Habana no pude menos que admirar a lo lejos (que realmente están muy cerca) esas torres petroleras. Llega el olor, se siente en el ambiente. Es algo indescriptible y el pensar que es producto de la ingeniería humana aquello que puede sorprender. Dicen que en Veracruz puedes ver algo parecido. Volteo a los lados, volteo atrás…sé que no es cierto.

Foto: Lila Sarai
Tal vez algunos ya conozcan un poco de Cuba y habrán visto en fotos o documentales acerca del transporte: los famosos camellos, la “gua gua”, el cocotaxi y demás. Sin embargo, este autobús me llamó mucho la atención. Pienso en los camiones que circulan en México tapizados con cosas que nada tienen que ver con nosotros, es decir, no reflejan nada con lo que yo me identifique, en cambio, son una invitación a ser alguien que no soy, a consumir algo que tal vez no necesite. Preferiría ver así mis camiones en la ciudad…
Foto: Lila Sarai
Este es un puente que se encuentra entre La Habana y Matanzas. El recorrido difícil de explicar. Ir en un Ford de esos que sólo llegué a ver en películas de antaño mientras la plática y el intercambio cultural se manifestaban dentro es difícil de expresar…ojalá algún día pudiera…